Cólera
Calavera
de impala clavado
en
el tambor de fuego de la tierra,
fiebre
intestinal
que
cubren pechos desecados
y
la macabra danza del medioevo
otra
vez sobre las charcas.
Dormita
el caimán
Bolsas
de plástico
respiran
en los suburbios
y
los vientres se vacían.
El
hambre huele
y
la hiena se ríe
a
las puertas del hierro corrugado.
Hay
fiebre
en
los bellos rostros de ojeras sin salida.
No hay comentarios :
Publicar un comentario