martes, 19 de mayo de 2015

SALA DE ESTAR
Rutas indelebles

Íbamos en un camión
cargado de frutas.

Olía a humo de cigarro y a sudor:
mi padre conducía.

El camión sigue dando tumbos
por carreteras que no identifico en este plano:

Mi mano
se asoma por la ventana, sucia de óxido.
Fernando Maldonado


No hay comentarios :

Publicar un comentario