miércoles, 14 de octubre de 2015

14

La ciudad tiene ojos de diamante,
glamorosos por el carmín y por la fiebre.
La ciudad tiene rumores de brisas de Chanel
y caderas en la city
que alumbran las miradas.

(El homo sapiens firmó su póliza de seguros el día del bautismo).

La ciudad tiene ojos sin cornea
y manos que palpan albañales.

Hay relojes sin saetas,
lomos roedores que cantan nanas
y restos de sucias jeringuillas.

Grandes titulares sucumben cada noche
en brazos de africanos que hurgan la basura.
Agim Sulag

No hay comentarios :

Publicar un comentario