LA VUELTA AL MUNDO
EN UN PLIS PLAS
El mundo es un pañuelo, y nuestra labor es detectar no solo
donde están los mocos, sino que clase de mucosidad hay en ciertas partes de ese
pañuelo: bacterias, microbios o virus.
A todos nos gustan los pañuelos Hermes, de 500 euros la
pieza. Pero una gran porción de la población mundial se conforma con los
kleenex de los chinos. Cuando visité Agra, a la salida del Taj Majal me
encontré con unas niñas muy monas que vendían pasminas a quince rupis.
Monísimas, las niñas que las vendían. Pero todos sabemos que
esa hermosura no durará dos lustros porque está condenada a una escudilla de arroz con cebolla, a curry con boniatos y
a tragos de agua archicagada y a infinitas horas laborales para confeccionar
calzoncillos a medio euro.
Cuando fui a China se nos decía que crecía a más de dos
dígitos por año; hoy no, hoy China ha frenado su crecimiento, ni crece ni engorda. En este aspecto son la envidia de
occidente, que se pasa las horas a dieta y no le cunde. Mas veamos, por qué no
crece China, pues sencillo porque China
es la fábrica del mundo. Todo lo que se compra está hecho en china. Los
españoles hacíamos zapatos en Elda, los italianos,
camisas de seda, los suizos, relojes, los franceses, sujetadores, los
argentinos, cinturones de cuero. Todos hacíamos algo que hoy se hace en China.
Menos los alemanes, que fabrican Mercedes.
La política de contención de
gasto a la europea tiene una razón lógica: si el problema de nuestro desarrollo
es la deuda gastemos menos. Pero gastar menos supone pagar salarios menores,
salarios con los que no podemos comprar apenas ni lo que necesitamos. ¿De qué
sirve producir mucho si no lo puede comprar nadie?
Si la fábrica del mundo es
China, China no vende lo que produce porque Europa no lo puede comprar, ergo
produzcamos menos, y por lo tanto compremos menos petróleo, menos materias
primas. Si no hay demanda de petróleo, baja de precio. Y para colmo dicen que
los americanos con una técnica llamada Fracking, que tiene algo de fucking,
mediante ácidos abrasivos e ingentes
cantidades de agua dejan los campos como un urinario en carnavales. Pero
hay mas, los países sudamericanos venden sus materias primas a China, para
crecer, porque ya saben ustedes, capitalismos es producir, crecer, vender,
beneficiarse. Si falla una pata de esta estructura, se escacha la burra.
Brasil, Argentina, Venezuela además de ser unos pedorros gobernando, se han
quedado sin clientes, sí. Porque Arabia Saudí rasca el suelo y saca petróleo, y
Venezuela necesita vender a 60$ el barril. Se comprende, ¿no?
Arabia tiene más intríngulis: Este país de los desiertos tiene
un antiguo tratado con EEUU por el cual EEUU le vigila, le cuida, le protege y
a cambio los wahhabitas proveen de petróleo al mundo para que no pare la rueda,
y el petróleo se vende desde la firma de aquel tratado en dólares. Uno diría,
que bien, no pasa nada... pues sí que pasa, porque la dinastía saudí está en el
poder gracias a la religión sunita rama wahhabi. Porque los países musulmanes
son todos teocráticos, es decir, Alá los gobierna a través de la interpretación
que el Califa hace de la Suna coránica. Y los sauditas expanden su religión por
el mundo como lo hacen los misioneros cristianos, pero por la fuerza, es decir,
a tiro limpio y con la autoinmolación de chicos casaderos que tienen tantas
ganas de sexo que se van al Paraíso a follar con las huríes. Islam o degüello.
Los atentados de Charlie Hebdo no deben ser achacados a la manos exclusivas de
radicales yihadistas, los atentados nos enseñan una realidad muy distinta. Lo
que está ocurriendo no es una guerra de
religión, sino que son las huellas de un profundo juego geopolítico que está en
manos de potencias occidentales y de los amos del mundo. A día de hoy EEUU, sus
socios de la OTAN, sus socios regionales, como Israel, Arabia Saudí, Qatar,
están armando, financiando, protegiendo, formando y apoyando a los extremistas
islámicos. Su objetivo: un cambio de orden en Medio Oriente. Fruto de toda esta
estrategia, la tensión con las naciones islámicas irá en aumento y la crisis
internacional crecerá en un futuro próximo porque lo que lo que estamos viendo
en el presente no es una simple guerra de religión, sino la huella de un cambio geopolítico de profundo y largo
alcance.
Esto dice Daniel Estulin, en su
ensayo: “Fuera de control” que según el Wall Street Journal, es uno de los
pocos estudiosos que ha entendido las
razones reales de la crisis mundial.
Los americanos, el Club de Roma
y otros clubs cuyos nombres no detallo para no aburrir a mis colegas, pensaron que lo mejor para acaparar riqueza y
poder era el famoso divide y vencerás,
trocear los países, hacerlos pequeños. Y se inventaron las primaveras
árabes, que a los hombres de la calle,
occidentales, nos parece bien porque como hemos pasado en el siglo XVIII por la Ilustración, y en el
XIX por la independencia americana y la revolución francesa pensamos que la
lógica y la razón ilusiona a los pueblos a alcanzar su bien estar; pero no, la
primavera árabe florecería muy bien el
Cairo, en Túnez, y en alguna otra ciudad de más de un millón o dos de
habitantes, donde los marines americanos tengan cabarets. Pero en las grandes
zonas rurales, los Hermanos Musulmanes son más queridos que los pasos de la
semana santa en Sevilla, y otros grupos religiosos en otros lugares. Total que
la primavera árabe se quedó como la Pantoja, en la cárcel.
Como si fuera una red de vasos
linfáticos las cédulas yihadistas se extienden por África desestabilizando el
continente. Quid prodest, a quien aprovecha. O de dónde saca para tanto como
destaca. Son preguntas pertinentes.
Europa, como una madre con dos
grandes tetas llenas de leche, no quiere dar de mamar a tanto moro porque tiene
miedo a que le muerdan el pezón. Ella tiene buenas intenciones, sabe que la
moreria tiene recursos, y no quiere soltarlos, pero entre lo de las madrasas
saudies y la primavera árabe, se ha quedado vestida y sin novio. Son las
contradicciones de las que habló el marxismo.Y cuando ve a todos los vecinos
llegando a su puerta, no se acuerda de cuando tenía la roña pegada a las nalgas
y las piernas, no, ella solo se acuerda de haber sido la diosa del mundo.
A mí me gustaría que EEUU fuera
como cuando veíamos el film “Días de vino y rosas”, pero eso era demasiado
lindo. Gracias al dólar son ellos los líderes de las “High technologies” y eso
les salva, más a sus grandes corporaciones que a toda su población (dije toda).
Pueden plantarle cara al Rambo Putin, que se defiende como gato panza arriba en
Siria y en Ukrania. Y en este totum revolutum en que se ha convertido el mundo,
un día vemos a Aznar recibiendo dos sonoros besos de Gadafi, otro día yo voy al
Egipto de Hosny Mubarak como si nada, a los palestinos les tienen cogidos por
allá los judíos, hezbolá recibe un pepinazo de los yihadistas del ISIS, a la
Rita Barberá le sale pelo en la barba y doña diferido cada día se parece más a
Aldonza Lorenzo.
En nuestro país culpamos a los
políticos porque no se ponen de acuerdo, pero ¿nos revelamos por ser comparsas
en la geopolítica, en el mundo financiero, en la deslocalización de las
empresas, en la competitividad a la baja?
Cuando teníamos 70% de deuda del
PIB era imposible de aguantar tanta deuda, pero hoy tenemos 99% de deuda, y el
señor Draghi dice que nos va a dar más dinero para ver si de una vez los bancos
empiezan a bailar tangos. Pero
el único tango que saben bailar es aquel de siglo XX cambalache problemático y
febril/ el que no llora no mama/ y el que no roba es un gil.
En definitiva que yo sueño por
las noches que la Ángela Merkel y el director del Deutsche Bank se pierden por
los barrancos de la Gomera, pero cuando me despierto me doy cuenta de que
Schauble nos dice: no Podemos. Y eso si que es cal viva, don Pablo.
Esto parece cada vez más un
neofeudalismo.
Adrian McDonald
ResponderEliminarMadre del amor hermoso! Esta vuelta al mundo que me has dado ha sido más didáctica, exhaustiva y meteórica que la de Fidias Fog ¡80 días en globo a bordo de tus letras condensadas en pocos minutos! Increíble JOAQUÍN. Te contrato de profe! aunque no sé si darte las gracias o matarte porque aun cuando lo intuía, ahora sé seguro que nos quedan dos telediarios en este planeta de pandereta que tocan 4 listos, de los que uno segurísimo es chino, otro lleva turbante y los otros dos son judíos de ascendencia rusa uno y el otro transgénico de Massachusetts ;)
Muy muy bueno, en serio ... un beso enorme!